Es por eso nuestra distorcionada percepción de democracia; donde los sindicatos y cooperativas en lugar de ser herramientas democraticas son armas de perpetuidad demagógica y envilecidora del liderazgo, optuso, obeso, avaricioso... el lider de nuestra democracia se levanta como una necesidad de la masa de sentirse protegida y acompañada por el paternal tlatoani, la necesidad de las bases de trabajar para el "Señor", definición del demonio misterioso que se esconde tras una nuve de secretarias, guardaespaldas, aviones privados y sometimiento de consciencias: "yo trabajo para el 'Señor', yo soy gente del 'Señor'; si 'Señor', no 'Señor', como usted diga 'Señor'". Ese demonio que ya en el partido se convierte de "Señor" en "Licenciado" con la misma connotación y la misma letanía.
Y creemos que eso es democracia, el "Señor", "Licenciado", "Diputado" o el "Lider" son ese hijo de dios y del diablo, el demonio que lo mismo hace el bien y el mal, es el dios antropomorfico que con las pasiones humanas, pero con el poder de dios para crear el bien o el mal en la vida del humano. Le amamos y le necesitamos tanto como le odiamos, nos hemos convertido en la masa anónima que en su puta vida conocerá al "Señor" o será atendida por el "Licenciado" o el "Diputado".
En ese amor odio del demonio (ser mitad deidad, mitad humano) nos sentimos cada vez más pequeños, es lo que le conviene a nuestro "Lider". Hacernos creer que sin él no somos nada, aunque con él seamos casi nada, la historia de los oprimidos es la historia de la minimización cultural de un grupo. Y en México hay tantos grupos... están los indios, los nacos, los comunistas, los pejistas, los yunqueros, los fresas, los regios, los oaxacos, los jarochos, los ninis, cada uno desprecia a los demás porque los ve menos o los ve más... hay desconfianza entre cada grupo, entre cada vecino, entre cada hermano... ¿algún día los mexicanos nos hemos considerado una sola raza?... unos muestran las cicatrices de cientos de años de opresión comenzando con el desprecio de su cultura... para ser superior que el otro hay que demostrar primero que el otro es un pendejo... que su cultura no sirve, como su lenguaje, su ropa, unos por ricos otros por pobres, unos por ignorantes y otros por intelectuales; todos tenemos razones o pretextos para odiarnos o al menos para rivalizar con desconfianza...
De ahi nacen la falta de una cultura de convivencia social; la agresión escala desde infantiles rivalidades por un asiento en el metro o en el camión, por la siembra de chiles hasta el deseo de tener lo que el otro tiene a como de lugar... aunque sea robándoselo, secuestrándolo, matándolo... gracias a la falta de creer que la democracia existe, de que todos somos iguales ante la ley, nuestra rebeldía se desfoga en pandillas de niños sicarios que matan a un fulano por 200 pesos y aunque sea el fulano equivocado igual lo matan e igual cobran...
Los cangrejitos mexicanos que cuando ve que alguno va a salir del frasco todos lo jalan pa' dentro pa' que todos estemos parejos, no vaya a ser que este pobre pendejo que salga se le ocurra convertirse en el proximo "Señor" al que amaremos y odiaremos con vehemencia equivalente...¿bastará comenzar con el ejercicio de ver a todos los que se crucen hoy por mi camino como mis iguales? Con el mismo derecho de piso, de llegar temprano, de ilusionarse, de crecer, de creer, de esperar, de poner su parte para construir un nuevo México con consciencia de igualdad, con cultura democrática; sin demonios, ni Salinas, sin Calderones, sin Chapos, sin Televisa, o Lopez Dorigas a quienes he aprendido a creer que son deidades. ¿Podremos cambiar el haber crecido chingando a los demas pa' que no me chinguen a mí?... pero con la esperanza de hacer lo urgente y protestar, y votar y estudiar pero al mismo tiempo sembrar la importancia de ver en cada mexicano no un soldado, sino un hermano... cursi pero necesario...
Estás describiendo al neoliberalismo... No es México el problema, no son los mexicanos, es esa arma de destrucción masiva creada por el Imperio... el "Fin de la historia", la "gestión" para resolver los problemas de "la gente", la lucha contra la inseguridad que potencia y multiplica esa inseguridad... No es México... es el Neoliberalismo...
ResponderBorrarPublicado en mi blog http://adriancorbella.blogspot.com.ar/2015/04/cultura-democratica-por-eduardo-corona.html
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